Fácil
4 h
span>Tras llegar al Refugio de Scoiattoli en telesilla desde Bai de Dones, dirígete a la izquierda hacia la pequeña y esbelta Torre Inglese. Tras recorrer la «galería» formada por la Torre Quarta Alta y la Torre Quarta Bassa, saldrás justo al centro del conjunto de pináculos partidos y derribados, restos del gigantesco desplome primordial del Monte Averau.
Zigzagueando justo debajo de estas paredes, puedes ver los pitones que utilizan en verano los numerosos escaladores para subir a las fabulosas Torres. Fue precisamente aquí donde los guías de montaña e instructores de montañismo de Cortina empezaron a enseñar la técnica de la escalada, primero en pequeñas rocas preparadas específicamente para este fin y luego en paredes más altas.
Tras dejar atrás las Torres, en dirección este te encontrarás por encima del Refugio de Cinque Torri y podrás admirar unos cuantos pinos cembros aislados, que presentan siempre formas particulares, casi nunca lineales, al estar modelados por las fuerzas de la naturaleza. Desde el Refugio de Cinque Torri, desciende por el caminito durante unos 300 m hasta que veas las señales del sendero n.º 439 a Cianzopè.
Si sigues este camino, llegarás al «Cason de Claudio», un refugio típico de montaña donde puedes parar y admirar los picos de Croda da Lago. Al volver al sendero n.º 439, continúa bordeando primero la «Boa di Cinque Torri» y luego adéntrate en el bosque para llegar a un camino señalizado que desciende hasta Cianzopè (1732 m) y la carretera de Paso Falzarego.
Para este itinerario, es aconsejable disponer de dos coches: uno en Bai de Dones y otro en la entrada del sendero hacia Cinque Torri en la localidad de Cianzopè, en la estación intermedia del telecabina Skyline, para cogerlo a la vuelta.
Refugio de Bai de Dones, Refugio de Scoiattoli, Refugio de Cinque Torri
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