Cortina está situada en el corazón de los Dolomitas, una de las zonas de escalada más hermosas y espectaculares de los Alpes. Escala casi exclusivamente sobre la Dolomía, una roca sedimentaria rica en hendiduras y grietas de diferentes tamaños; en el caso de la Dolomía Principal, a menudo hay salientes, techos y asideros afilados y escuadrados debido a la particular estratificación de la roca.
Cortina d’Ampezzo cuenta con más de 1000 rutas clásicas y modernas que puedes descubrir escalando en los Dolomitas, conocidos en todo el mundo por su belleza natural y ambiental y reconocidos como Patrimonio Natural de la Humanidad por la UNESCO.
El rocódromo Lino Lacedelli ofrece más de 80 vías interiores con niveles del 3b al 8b+ en una altura máxima de 24 metros y con hasta 30 metros de extensión.
El bouldering es una especialidad que se practica en rocas de poca altura y sin cuerda, pero con colchonetas protectoras que se colocan en la base de las rocas. Este tipo de especialidad ya se practicaba a principios de los años setenta en Estados Unidos como entrenamiento y como especialidad independiente. La roca de estos peñascos hace que el bouldering en Cortina sea muy especial, ya que se trata de dolomía y no de granito o pórfido; esto hace que la limpieza sea más difícil, pero ofrece líneas muy bonitas para todos los niveles de dificultad. Los bloques son, en general, de dificultad media-baja; sin embargo, también hay algunos de dificultad alta que van de 7c+ a 8b.
Para sentirte siempre en un rinconcito de Cortina, solo tienes que mantener el contacto.
