Como uno de los diez mejores restaurantes de montaña de los Alpes, el refugio Averau ha ganado prestigiosos premios italianos e internacionales a lo largo de los años.
Sandro Siorpaes y su esposa Paola, con sus hijos Margot y Matteo, deleitan a sus clientes con una cocina tradicional pero refinada.
Prueba los casunziei rellenos de šciopetìs, una hierba silvestre de sabor inconfundible, recolectada por los propios cocineros de nuestros prados en el mes de mayo. Y, para continuar por todo lo alto, pappardelle Averau, timbal de faisán y brécol, “”sombreros alpinos”” y excelentes platos de caza.
No faltan los deliciosos postres preparados personalmente por Sandro y su equipo.
El ambiente cálido y acogedor te hará sentirse como en casa, pero a 2413 m de altitud.
Como uno de los diez mejores restaurantes de montaña de los Alpes, el refugio Averau ha ganado prestigiosos premios italianos e internacionales a lo largo de los años.
Sandro Siorpaes y su esposa Paola, con sus hijos Margot y Matteo, deleitan a sus clientes con una cocina tradicional pero refinada.
Prueba los casunziei rellenos de šciopetìs, una hierba silvestre de sabor inconfundible, recolectada por los propios cocineros de nuestros prados en el mes de mayo. Y, para continuar por todo lo alto, pappardelle Averau, timbal de faisán y brécol, “”sombreros alpinos”” y excelentes platos de caza.
No faltan los deliciosos postres preparados personalmente por Sandro y su equipo.
El ambiente cálido y acogedor te hará sentirse como en casa, pero a 2413 m de altitud.
Como uno de los diez mejores restaurantes de montaña de los Alpes, el refugio Averau ha ganado prestigiosos premios italianos e internacionales a lo largo de los años.
Sandro Siorpaes y su esposa Paola, con sus hijos Margot y Matteo, deleitan a sus clientes con una cocina tradicional pero refinada.
Prueba los casunziei rellenos de šciopetìs, una hierba silvestre de sabor inconfundible, recolectada por los propios cocineros de nuestros prados en el mes de mayo. Y, para continuar por todo lo alto, pappardelle Averau, timbal de faisán y brécol, “”sombreros alpinos”” y excelentes platos de caza.
No faltan los deliciosos postres preparados personalmente por Sandro y su equipo.
El ambiente cálido y acogedor te hará sentirse como en casa, pero a 2413 m de altitud.
Para sentirte siempre en un rinconcito de Cortina, solo tienes que mantener el contacto.