Alimentada por tradiciones y una curiosidad incansable, la cultura de Cortina tiene una personalidad libre y abierta al conocimiento, un marcado carácter artístico e intelectual, un respeto innato y orgulloso por la civilización y una espiritualidad que se eleva a grandes alturas. Con el majestuoso escenario de los Dolomitas, Cortina exalta las tradiciones y costumbres populares, realzando el arte, la historia y la religión del Valle del Boite.